El estornino europeo es un ave invasora que se ha adaptado a diversos entornos, formando grandes bandadas que pueden causar problemas significativos tanto en áreas urbanas como rurales.
Sus excrementos son portadores de hongos como el Histoplasma capsulatum, que puede causar infecciones respiratorias en humanos. Además, estas aves compiten agresivamente con especies nativas, desplazándolas de sus hábitats y reduciendo la biodiversidad.
En áreas agrícolas, los estorninos pueden alimentarse de frutas, granos y otros cultivos, causando pérdidas económicas considerables. En entornos urbanos, sus excrementos corrosivos dañan techos, vehículos y otras superficies, mientras que sus grandes bandadas generan ruido y molestias para los residentes. Implementar medidas de control, como el uso de repelentes y eliminación de sitios de anidación, es esencial para manejar su impacto
